Entiendo que cada uno es libre de hacer las interpretaciones que le parezca sobre los hechos. Por eso hay distintas aficiones, distintos gustos musicales y distintas ideologias.
Pero luego hay también unas reglas comerciales que llevan funcionando desde hace décadas y, en algunos casos, siglos. Y una de ellas es la de ofrecer incentivos para la compra de un producto. Estos van desde descuentos a “regalos”, pasando por participación en sorteos, acceso a ediciones especiales, etc…
No hay ningún tipo de “generosidad especial” ni de filantropía (aunque sí, en algunos, casos, de agradecimiento por el compromiso). Son números:
La opción de la suscripción implica:
Para el cliente
-Compromiso de un gasto sistemático continuado a largo plazo, incluso con algunos números que podrían ser no demasiado “apetecibles”.
-Acceso a un descuento (a veces solo si se hace en un periodo limitado de tiempo)
-Seguridad de recibir todas las entregas (con independencia de la demanda)
-Una serie de “regalos” segun avanza el número de entregas (esto es un incentivo a la permanencia en la suscripción, ya que no hay, este caso, obligación de permanencia)
Para la empresa:
- Conocer de antemano una cantidad fija que asegure, sin grandes riesgos, una determinada tirada. Con ello puede negociar con el fabricante precios mejores para volúmenes grandes.
- Asegurar un minimo de venta en algunos números cuya demanda podría haber sido mínima.
-Parte de esos descuentos por volumen (que los compradores de piezas sueltas no garantizan) los devuelven en forma de regalos.
En este caso, adicionalmente, había una Opción Premium consistente en el acceso a una “edición especial” consistente en el Bacalao y la entrega a domicilio. NO HAY NINGUN REGALO. Esa opción, que es un incentivo adicional para los suscriptores, se pagaba a su precio: 3 Euros al mes hasta la entrega 30.
Despues de dicha entrega no ha habido mas regalos (aunque el coste de las entregas ha sido el mismo) y para los que han seguido pagando la Opción Premium, se les ofrece el acceso una nueva “Edición especial” al final de la colección.
Yo creo sinceramente que si Salvat saca a la venta el Bacalao o el Bocanegra del final (o algunos de los regalos), jamás volverá a tener suscriptores ni Premium, ya que todos ellos (fieles, tambien por el interés) se sentirán defraudados y preferirán comprar (picotear) solo lo que les interese, incluidas las ediciones especiales (salvo por el tema de asegurar entregas)
Ha habido otros casos similares con Ediciones Limitadas y numeradas. El coleccionista pagaba un premium por la exclusividad. Pero como el molde estaba hecho, decidieron fabricar mas unidades y exprimir el molde. Resultado: perdieron toda credibilidad y la confianza de futuros clientes que ya no volvieron a creerse lo de las ediciones limitadas.
En fin. Es otro punto de vista tan válido, creo, como todos los que se han expresado aqui. Y sigo agradecido a Salvat por el esfuerzo que ha supuesto esta excelente colección que no hubiéramos soñado hace solo unos años.