Sí que se echa en falta "El escalímetro". No sé si su ausencia será temporal o definitiva.
Yo disfrutaba un buen rato leyéndolo, y mentalmente compartiendo las opiniones de Miguel, o discrepando con las mismas (porque tengo la sensación de que su visión del coleccionismo es más ortodoxa que la mía). En cualquier caso, es una pena no poder leer esas opiniones basadas en muchos años de experiencia y amplios conocimientos sobre un buen número de temáticas, y que siempre nos obligaban a pensar sobre los asuntos tratados.
Saludos